Uno que otro golpe o raspón es inevitable porque así es la vida. Y no pasa nada. Las golpes, las cicatrices y todos esos pequeños accidentes son anécdotas y aprendizajes muy valiosos en nuestro crecimiento. Pero, oye, muchos de ellos también son… evitables.
Y si podemos ahorrarnos un par de accidentes y una o dos heridas… ¿acaso no merece la pena que sepas cómo evitar esos accidentes en el hogar?
1. Entrando por la puerta…
Instala protectores de dedos y fundas para tiradores
¡Ay! ¿Quién no se ha pillado los dedos con la puerta? Evita sustos grandes en manos pequeñas colocando este tipo de protectores. Además, las fundas para tiradores lograrán tenerlos “controlados” en la habitación, sin que puedan abrir y escapar, rumbo a su siguiente misión suicida…
2. Armarios con productos o herramientas peligrosas
Asegúralos con cerrojos o en otras zonas inaccesibles
Cuando un peque entra por la casa, el suavizante deja de estar a un palmo del suelo para buscarse hueco en las alturas.
Y así, con todo tipo de productos sanitarios, medicinas y botiquines, electrodomésticos peligrosos, cuchillos y otros cubiertos, herramientas, tijeras, grapadoras, pegamentos, disolventes, pinturas…
¿Eres capaz de ponerlos a todos a una altura digna?
3. Escaleras
Instala rejas con barras en escaleras
Lo sé, vas a montar tu propio Alcatraz en miniatura. Pero hasta que ellos sean lo suficientemente maduros como para entender todo eso de las alturas, las barras deberán tener como mucho, 7 centímetros de separación entre cada una.
También es importante que la reja pueda ser retirada sin grandes problemas por un adulto si sucediese alguna emergencia.
4. Enchufes y placas de cocina
Coloca cubre enchufes y sistemas de seguridad
Existen muchos tipos de protección para que los niños no metan sus deditos en enchufes eléctricos y terminen dándose un calambrazo y un buen susto.
Colócalos en todos los enchufes de la casa que estén a una altura mínimamente accesible para ellos, y cubre las placas vitrocerámicas o de gas.
5. Tiras de la persiana, y otro tipo de cables colgantes
Átalos en zonas altas para evitar estrangulamientos
Verlos colgar es para ellos como un mecanismo psicológico de atracción irremediable. Mejor, ata los extremos a zonas más altas, y aleja de ellos cualquier mueble al que pudieran subirse para alcanzarlos.
6. Grifos, duchas y otras salidas de agua
Instala controles de temperatura para evitar quemaduras
El agua es otra cosa que le encanta a nuestros hijos. Y jugar con sus cambios de temperatura, una obsesión. Pero es necesario instalar limitadores de temperatura en los mandos de grifos y duchas para que no se escalden como cangrejitos, algo que un experto fontanero te dejará listo para tu tranquilidad.